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¿Qué es el hormigón excavable?
El hormigón excavable es el hormigón que se emplea para el relleno de huecos y de zanjas. Este cuando se endurece es muy fácil de excavar, razones del por qué se le conoce bajo este nombre, o usualmente llamado hormigón de relleno. Con este hormigón se pueden rellenar las zanjas con una gran rapidez, ya que posee propiedades autocompactantes.
Ventajas y beneficios del hormigón excavable
El coste del hormigón excavable puede llegar a ser inferior al hormigón convencional. Si consideramos el menor coste de colocación y que no tenemos que traer áridos luego colocarlos. Puede ser más que interesante desde el punto de vista económico como logístico el empleo de éste hormigón.
Otro beneficio del concreto excavable es la facilidad para ser excavado. Siendo de gran utilidad, sobretodo en ciudades pobladas donde muy seguido se realizan obras de reparaciones de todo tipo. Trabajos en redes existentes o nuevas, donde se vuelve abrir, romper o levantar calles donde ya se había actuado con anterioridad.
Pero la gran ventaja de éste tipo de concreto es la rapidez con la que se puede rellenar una zanja, envolviendo completamente las conducciones que contiene gracias a las propiedades autocompactantes.
Consejos para el empleo del concreto excavable
Para conseguir que el propio hormigón se encargue de alcanzar todos los puntos de una zanja, es conveniente verterlo a mucha velocidad. De manera que él mismo se va empujando para rellenar completamente el hueco y envolver los conductos que van a quedar enterrados.
De esta manera no quedarán vacíos en el relleno y se logrará una uniformidad en la compactación del mismo.
Uso del hormigón excavable en los conductos enterrados
Existe la posibilidad de aplicarle tintes a la masa del hormigón, de manera que se puedan utilizar diferentes colores en función del tipo de conducción que envuelva (cañería de gas, electricidad, agua, saneamiento).
Esto permitiría que, en caso de estar excavando, la aparición de un determinado color alertará al operario de la excavadora de la presencia de un determinado tipo de conducto. Sustituyendo así la colocación de plásticos de advertencia que en la mayoría de las ocasiones aparecen cuando la conducción ya ha sido dañada por la cuchara o balde de la máquina.
También se podría optar como alternativa donde para el recubrimiento de algunas cañerías, como las de redes de gas, exigen una losa de hormigón de protección para evitar los daños antes mencionado.
